Históricamente el cine comienza cuando el hombre dejó plasmada o grabada la imagen de un jabalí de ocho patas en el muro de su caverna de Altamira. Lo cual todo esto era motivo de estudio. Este hombre primitivo no pintaba por hacerlo, sino que pintaba animales para tener dominio sobre ellos. Es como dice Fieldler, “el arte comienza cuando el hombre se encuentra cara a cara con el mundo, que el hombre se afanó por reproducir el movimiento la vida de los seres y las cosas que veía a su alrededor”.
Tomas A. Edisón realizó los primeros estudios sobre la “cámara oscura”; Giambattista Porta logró definitivamente construir la “cámara oscura”; Kircher encontró el modo de reproducir la realidad con la linterna Magua y en enero de 1829 se daba a conocer la Fotografía o Daguerrotipo gracias a Louis Jacques Maudí y Jose Necípliore., habian descubierto una sustancia resinosa, llamada betin de Judea que permitía reproducir imagen. Todos estos descubrimientos dieron un gran paso para la infancia del Cine.
Ya para 1882 Etienne Jules Marey construyó el “fusil fotográfico” capaz de captar una serie de instantánea a 1/12 de segundos de intervalos, con el fin de reproducir el vuelo de un ave. Pero, pronto pensó en una cinta de celuloide horizontal, que pudiera moverse a cierta velocidad por un mecanismo de arrastre, que asegurara la regularidad.
Edison fue el primero que logró reproducir el movimiento en una banda de celuloide. Auguste y Louis Lumiere se llevan la gloria de haber sido los primero en proyectar las imagen en una pantalla, gracias al Cinematógrafo en febrero 13 de 1895.
El Cine en Santo Domingo
La historia del cine en la República Dominicana comienza una noche de agosto de 1900 en la ciudad de Puerto Plata. Esa noche se exhibieron once películas de la casa Lumiere, de Lyon, realizadas entre 1895 y 1899.
El empresario ambulante, que había llegado a Puerto Plata en agosto de 1900, era Francesco Grecco. Probablemente un hombre de negocio italiano había adquirido un proyector y una camara de la casa Lumiere, y recorria el caribe exh
ibiendo una y otra vez su aparato eléctrico y sus películas. Puerto plata, fue el local en que se exhibió por primera vez en Santo Domingo el Cinematógrafo Lumiere.
La aparición del cine constituía un atractivo mucho más novedoso que la asistencia a una novena, los juegos del día de San Andrés, etc. El empresario norteamericano, Mr Myers, exhibe en los salones de “La Republicana” un nuevo aparato de cine: el Proyectógrafo, que en realidad era el Vitascope de Thomas A. Edison, en 1900. Se presentaron algunas escenas interesantísima de la guerra de Filipinas y del Transvaal, y otras novedades de los Estados Unidos.
En verano de 1915, llega a Santo Domingo el puertorriqueño José de Diego. El fotógrafo Rafael Colorado, acompaña también al presidente de la cámara de delegados, para filmar un documental de la visita de José de Diego a Santo Domingo. En 1922, aprovechando la solemnidad de la coronación de la virgen de la Altagracia, el fotografo y editor Francisco A. Palau, el empresario Juan B. Alfonseca y el fotografo Tuto Báez, emprenden la filmaciòn de la primera de la primera película autentica dominicana, La Leyenda de Nuestra Señora de Altagracia.
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